Málaga, España
Sevilla, España
Cordoba, España
Granada, España
Cádiz, España
Málaga, España
Sevilla, España
Pamplona, España
Jaén, España
Madrid, España
La fibrilación auricular aumenta de manera marcada el riesgo de ictus isquémico. A pesar de que los antagonistas de la vitamina K (AVK) reducen ese riesgo, tienen una eficacia limitada y numerosos inconvenientes que han hecho que durante años hubiese una proporción importante de pacientes con fibrilación auricular no anticoagulados. En cambio, no solo los ensayos clínicos, sino también los estudios en práctica clínica real y últimamente los estudios poblacionales, han demostrado que los anticoagulantes orales de acción directa (ACOD) tienen más eficacia y seguridad y un mejor beneficio clínico neto que los AVK. De hecho, en las regiones donde la prescripción de ACOD es mayor, está disminuyendo la incidencia de ictus isquémico, además de los costes generales asociados con la fibrilación auricular. A pesar de que en los últimos años ha aumentado la prescripción de ACOD, España es de los países con menores tasas de prescripción de toda Europa, lo que podría asociarse con mayores tasas de ictus isquémico. A pesar de que todas las guías posicionan los ACOD como de primera elección frente a los AVK para los pacientes con fibrilación auricular no valvular, en España, debido a las restricciones impuestas por el informe de posicionamiento terapéutico, con necesidad de visado, y también por la inercia terapéutica, es mayor la prescripción de AVK. Son necesarias medidas inmediatas para corregir esta situación, y así mejorar el pronóstico de nuestros pacientes.
Atrial fibrillation markedly increases the risk of ischemic stroke. Although vitamin K antagonists (VKAs) reduce this risk, they have limited efficacy and several disadvantages, which has meant that over the years a substantial proportion of patients with atrial fibrillation have remained without anticoagulation. In contrast, clinical trials, studies in routine clinical practice and, more recently, population-based studies have all demonstrated that direct oral anticoagulants (DOACs) are more effective and safer than VKAs and also have a greater net clinical benefit. In fact, in regions where the DOAC prescription rate is high, the incidence of ischemic stroke has decreased, as have the overall costs associated with atrial fibrillation. Although the prescription of DOACs in Spain has increased in recent years, the country has one of the lowest prescription rates in Europe, which may be associated with a higher incidence of ischemic stroke. Despite clinical guidelines all recommending that DOACs should be used in preference to VKAs in patients with nonvalvular atrial fibrillation, more prescriptions are issued for VKAs in Spain, largely due to restrictions imposed by national statements on appropriate medicine use (including the need for approval), but also because of therapeutic inertia. Immediate action should be taken to correct this situation and to improve patients‘ prognoses.
© 2001-2024 Fundación Dialnet · Todos los derechos reservados