Se presentan cuatro casos de fístulas cutáneas cuyo orígen era una infección dental.En el primer caso se eliminó casi toda la fístula durante la cirugía periapical del diente causal,produciéndose la resolución espontánea del proceso cutáneo a los tres meses.En el segundo caso la simple extración del diente causal y el legrado de la infección apical consiguió la desaparición de la fístula.Fue preciso intervenir a los pacientes para eliminar las lesiones cutáneas residuales ,con el fin de mejorar el aspecto estético.
© 2001-2024 Fundación Dialnet · Todos los derechos reservados