Resumen de ADO`92: La esponsorización de una olimpiada: las empresas toman las riendas.
Todavía faltan cuatro años pero nadie quiere quedarse descolgado. Desde que se conoció oficialmente a Barcelona como próxima sede de los Juegos Olímpicos en 1992, los planes de todos los sectores involucrados han ido destinados a conseguir un buen papel, un protagonismo en estas olimpiadas españolas. Las altas jerarquías del deporte español tomaron conciencia de la responsabilidad que esta concesión cargaba sobre sus espaldas y a tal fin brindaron una oportunidad de participación a la iniciativa privada. El Consejo Superior de Deportes y el Comité Olímpico Español fueron los artífices de su creación, mas tarde se unió televisión, y la Asociación Deportes Olímpicos es hoy una realidad que ya ha comenzado a trabajar con el objetivo de servir de vínculo entre la empresa privada y el deporte español para realizar un buen papel en las olimpiadas. Un presupuesto de cerca de 3.000 millones al año permitirá a 500 deportistas gozar de las mejores condiciones para conseguir el triunfo. Seúl será el primer paso, Barcelona, la prueba de fuego y Atenas la incógnita de lo que pasará en el futuro, cuando el "boom" de lo español haya pasado a la historia.
