En el momento en que las autoridades supieron del primer caso de coronavirus todo se paralizó. Se cerraron negocios, restaurantes, bibliotecas. Los centros de entrenamiento, parques y canchas también cerraron. Para cualquiera que practique un deporte el encierro implica una pérdida de libertad, pero para los basquetbolistas profesionales significa que no hay público, ni torneos, ni premios, ni sueldo. Pasó el tiempo y el discurso de las medidas de bioseguridad empezó a resonar en la calle. Tomar distancia, decían, lavarse las manos cada hora, andar con tapabocas siempre. ¿Cómo puede un jugador volver a la cancha con tapabocas?¿Cómo puede mantener distancia en un deporte de contacto?
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