Este artículo emplea el esquema de representación mitológica de Jordan Peterson (que deriva del análisis de los arquetipos de Jung) para tratar de ofrecer una interpretación novedosa de El cuento del Grial de Chrétien de Troyes. Se concluye que Perceval es el héroe exploratorio que se aventura en el mundo de lo desconocido (el bosque, lo inexplorado, el caos, la Naturaleza, la Gran Madre), para extraer conocimiento que revitaliza la tradición. Al afrontar lo desconocido (el dragón del caos) el héroe arriesga su integridad física y moral. Llega, incluso, a extraviar el ideal durante años, pero su humildad (su apertura cognoscitiva) le salva. Reconoce su ignorancia y renace espiritualmente. Cabe conjeturar, de acuerdo con la lógica interna de esta narración inacabada, que el héroe seguirá buscando la lanza y el Grial; hasta que, encontrándolos, cure la invalidez del Rey Pescador y devuelva la fecundidad a sus tierras (y de ese modo, simbólicamente, redima también a su padre de su muerte desgraciada y reverdezca las tierras de la Yerma Floresta). Así, Perceval, el héroe exploratorio, el conocedor, actualizará lo ya conocido (la caballería, lo explorado, el orden, la Cultura, el Gran Padre), transformándolo creativamente.
© 2001-2024 Fundación Dialnet · Todos los derechos reservados