Un gran inconveniente de los tratamientos actuales contra los trastornos autoin- munitarios es su radicalidad, que provoca numerosos efectos secundarios y vul- nerabilidad ante las infecciones.
Se investigan nuevas terapias dirigidas contra trastornos como el lupus, la esclerosis múltiple o la psoriasis que sean más específicas. Algunas pasan por dotar al sistema inmunitario de medios con los que neutralizar a las propias células o anticuerpos anormales.
La escasez de resultados ha fomentado la búsqueda de remedios paliativos o retardantes, en ocasiones alejados de la ortodoxia médica, con frutos desiguales hasta la fecha.
© 2001-2024 Fundación Dialnet · Todos los derechos reservados