El artículo aborda, desde una perspectiva cualitativa y antropológica, las representacionessociales sobre los agricultores entre 1780 y 1866 por parte de funcionarios peninsulares, élites letradas y autores costumbristas. Se argumenta que la Independencia propició una ruptura en dichas representaciones, lo cual se reflejó en el paso de labrador a campesino como término de uso predominante. Si bien estos compartieron buena parte de sus supuestos defectos, a los campesinos se les atribuyó un papel más positivo en el futuro del país. La mirada más benigna hacia los campesinos los hizo funcionales a la construcción de la nueva nación y permitió que se dieran pasos tendientes a considerarlos un elemento importante de la identidad nacional.
The article addresses, from a qualitative and anthropological perspective, the social representations of agriculturalists between 1780 and 1866, by peninsular officials, literary elites and costumbrist authors. It is argued that Independence led to a rupture in the representation of agriculturalists, which was reflected in the transition from labrador to peasant as the predominant term of use. Although they shared a good part of their alleged defaults, peasants were attributed a more positive role in country’s future. The more benign look towards peasants made them functional to nation-building and permitted moving towards considering them important to national identity.
© 2001-2025 Fundación Dialnet · Todos los derechos reservados