Al igual que en cualquier sistema organizativo o productivo, los sistemas de la Calidad deben tener como fin último mejorar los resultados de la organización. Así, los mecanismos con los que se pretende alcanzar dicho objetivo se basan en la satisfacción de las necesidades del cliente, determinando cuáles son esas necesidades e incorporándolas como requisitos que han de proporcionar los productos o servicios ofertados. Las ISO 9000 ofrece numerosas recomendaciones y guías al respecto, por lo que son de gran utilidad también para los laboratorios.
© 2001-2024 Fundación Dialnet · Todos los derechos reservados