Resumen de Impresión 3D: una nueva era de la medicina personalizada

José Javier Relinque Madroñal, Marina León, Juan Rodríguez Hernández

• español

  La industria de la salud está evolucionando hacia el desarrollo de una medicina personalizada. El enfoque tradicional de “talla única” se está convirtiendo en cosa del pasado, y se requieren nuevas plataformas innovadoras para producir medicamentos a medida. Los procesos de fabricación masivos convencionales resultan inadecuados para producir medicamentos personalizados, toda vez que está surgiendo una necesidad creciente para que la industria farmacéutica se adapte y evolucione hacia la implementación de nuevas tecnologías para la producción de terapias personalizadas. En este sentido, la impresión 3D podría remodelar la forma en que se fabrican los fármacos debido a su capacidad para producir medicamentos a medida de las necesidades individuales de cada paciente.

  La flexibilidad sin precedentes de la fabricación aditiva, también conocida como impresión 3D, permite la producción de printlets o medicamentos impresos con diferentes formas, tamaños y geometrías bajo demanda, directamente en el punto de cuidado donde se necesitan. En la fase inicial del desarrollo de fármacos, esta tecnología podría ser útil para producir pequeños lotes de formulaciones adaptadas a los requisitos del estudio. Sin embargo, varios controles regulatorios y de calidad deben superarse como requisito antes de la asimilación completa de la impresión 3D en este contexto. Mientras las tecnologías 3D siguen evolucionando, la consolidación del concepto de impresión 4D con materiales estimulables permitirá el desarrollo de “medicamentos inteligentes”, lo que proporcionará nuevas estrategias para mejorar las terapias dirigidas. En un futuro cercano, las oportunidades de la impresión 3D como plataforma de fabricación se pueden aprovechar al máximo para producir productos farmacológicos personalizados tanto en el sector farmacéutico como en la práctica clínica

• English

  The healthcare industry is evolving toward the development of a more personalized medicine. The traditional approach of “one-size-fits-all” is becoming a thing of the past, and new innovative platforms are required to produce tailored medicines. Conventional manufacturing processes based on mass manufacture are unsuitable to produce personalized medicines, since an increasing need is arising for the pharmaceutical industry to adapt and embrace new technologies for tailored therapy production. In this sense, additive manufacturing could reshape the way that medicines are manufactured due to its capability to produce bespoke medicines tailored to the individual needs of each patient.

  The unprecedented flexibility of additive manufacturing allows the production of printlets with different shapes, sizes, and geometries on-demand, directly at the point of care. In an early-phase drug development, this technology could be exploited to produce small batches of formulations adapted to the requirements of the study. However, several regulatory and quality control requirements must be overcome before the full implementation of additive manufacturing into practice. Meanwhile, additive manufacturing technologies are still evolving, and the advent of 4D printing will allow the development of “smart medicines” that provide new strategies to improve targeted therapies. In near future, the opportunities of additive manufacturing as a manufacturing platform can be fully exploited to produce customized pharmaceutical products both in the pharmaceutical industry and in clinical practice