Nos ha abandonado un revolucionario. Un hombre honesto que mantuvo sus convicciones en estos tiempos de continua mudanza. Un luchador que nunca tiró la toalla. Ha sido un honor para El Viejo Topo que su firma apareciera en varios números de esta revista, allá por los años setenta.
© 2001-2024 Fundación Dialnet · Todos los derechos reservados