J. Rodríguez García, P. Forastero Fernández-Salguero, J. Salvador Camacho, José Antonio Expósito Tirado
Exponemos dos casos de pacientes jóvenes de sexo masculino que tras sufrir un accidente de tráfico ingresaron politraumatizados en nuestro hospital presentando un traumatismo craneoencefálico grave, diagnosticándose posteriormente en ambos casos una trombosis carotídea postraumática (TCP). En el primer caso se observó una imagen compatible con un ictus extenso al realizarse un escáner craneal de control, confirmándose a continuación la TCP en una angiografía. La evolución después de varios meses ingresado ha sido muy pobre, presentando mutismo, grave afectación motora de miembros derechos y una dependencia total valorada por la medida de la independencia funcional. En el segundo caso se comprobó una hemiparesia derecha franca y una tumefacción en cara lateral del cuello tras revaloración inicial, realizándose una eco-doppler y consecutivamente una angiografía que confirmó la existencia de TCP. Mediante implantación quirúrgica de un stent a nivel de la lesión se consiguió buena revascularización, evolucionando favorablemente en pocas semanas con mínimas secuelas cognitivas y motoras.
Los traumatismos craneofaciales graves se asocian con una frecuencia significativa a lesiones carotídeas postraumáticas. Dada la alta mortalidad y el alto índice de secuelas neurológicas que conllevan estas lesiones cuando se complican, es muy importante la revaloración neurológica del paciente, así como la realización de una eco-doppler ante la mínima sospecha, que se complementará con una angiografía o angio-resonancia magnética, si fuera necesario, para confirmar el diagnóstico.
© 2001-2024 Fundación Dialnet · Todos los derechos reservados