Resumen de Observaciones sobre abstinencia y carnalidad en la literatura mexicana del siglo XIX
Este texto forma parte de una secuencia sobre la representación del amor en la literatura mexicana del siglo XIX. Inmersos en un género que los escritores decimonónicos mismos llamaron “leyenda de amores”, su narrativa circuló –con frecuencia de manera irregular-, en los diarios. Los receptores de esas historias vivieron entre la segunda mitad del siglo XIX y las primeras décadas del XX; con ellas se educaron los tatarabuelos, los bisabuelos, sus esposas e hijos. Aquí mostraré el punto de vista de esos “escritores románticos” -tal como los denominó la historia literaria posterior-, sobre un sentimiento difícil de abarcar que en ese momento se hallaba en plena construcción de un nuevo sentido. La confluencia del hogar moderno, los roles como padres en la familia nuclear o los nuevos tiempos del trabajo son factores inscritos en el mismo ámbito. Aquí centraré la atención en uno de los narradores (educadores) singulares sobre aquel sentimiento: Florencio M. del Castillo. Sus textos nos dejan reconocer el modelo de amor que perseguía su época: en las prácticas atribuidas a sus personajes se revelan las expectativas y argumentos que dieron contenido, en aquel contexto, al sentimiento del amor.
