RICYT: 25 años entre lo global y lo local

• Autores: Mario Albornoz
• Localización: Red Iberoamericana de Indicadores de Ciencia y Tecnología (RICYT): Agenda 2022.Temas de Indicadores de Ciencia y Tecnología / Laura Trama (ed. lit.), Manuel Crespo Alonso (ed. lit.), Rodolfo Barrere (ed. lit.), 2022, págs. 9-20
• Idioma: español
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• Resumen

  • En 2020 se cumplieron 25 años de la creación de la Red Iberoamericana de Indicadores de Ciencia y Tecnología (RICYT). La pandemia nos impidió celebrar ese cuarto de siglo en Lisboa, como estaba previsto, pero como la vida suele dar revancha, la tecnología ha acudido en nuestro auxilio y nos permitió realizar hoy este congreso en formato híbrido, un año más tarde. En 1995, año en el que se creó la RICYT, construir un sistema de indicadores de ciencia, tecnología e innovación implicaba la necesidad de crear un modelo capaz de resolver la tensión entre las normas técnicas de carácter internacional, generalmente surgidas en Europa o en la OCDE, y las necesidades de información propias de los países iberoamericanos, particularmente los de América Latina y el Caribe, cuya peculiaridad se manifiesta en muchos planos: su historia política, su multiplicidad cultural, sus dificultades económicas y los elevados niveles de pobreza de gran parte de su población. Fui uno de los protagonistas de la creación y de los primeros años de la Red. Por ese motivo, me propongo reseñar en esta presentación, algunos aspectos significativos del camino recorrido. Quiero mostrar la encrucijada en la que se desenvuelve la RICYT, que es la de conjugar lo comparativo a nivel internacional con los rasgos específicos que distinguen a los países de Iberoamérica. El tiempo es una dimensión esencial en los indicadores, ya que de lo que se trata es de entender procesos, reconstruir trayectorias, verificar tendencias y realizar proyecciones. El tiempo es también lo que nos permite valorar la vigencia de esta red. El escritor español Enrique Vila-Matas reflexionaba en uno de sus libros sobre la línea del tiempo y afirmaba, citando a Kierkegaard, que la repetición y el recuerdo son el mismo movimiento, pero en sentidos opuestos.

    Aquello que se recuerda –decía– se repite retrocediendo, mientras que la repetición propiamente dicha se recuerda avanzando.

    Recordar avanzando es una expresión que refleja lo que quiero decir, porque creo que lo más interesante de la RICYT es su futuro, un futuro que se basa en gran medida en la repetición sistemática de una búsqueda de certidumbres y de la comprensión de procesos en base a datos empíricos.