El pacto parasocial omnilateral como pacto social

• Autores: Francisco José Alonso Espinosa
• Localización: La Ley mercantil, ISSN-e 2341-4537, Nº. 102 (mayo), 2023
• Idioma: español
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• Resumen
  • español

    Exposición y tratamiento crítico de la doctrina del Tribunal Supremo sobre los llamados pactos parasociales omnilaterales. El pacto parasocial omnilateral, al estar pactado por la unanimidad de todos los socios de la sociedad, no responde a los criterios generales de caracterización doctrinal de los pactos parasociales por lo que no parece correcto el tratamiento del mismo de acuerdo con tales criterios generales. Por ello, puede ser apropiada la distinción entre pactos parasociales típicos (los relativos a la organización de la relación societaria y a los derechos y obligaciones de los socios como tales) y los atípicos. Si los primeros —típicos— son suscritos por todos los socios por unanimidad, el pacto parasocial es un pacto social real y efectivo siempre que no traspase los límites del art. 1255 CC, incluso si modifican o excluyen normas imperativas no fundamentales (o de orden público) del régimen específico de la forma social a la que son relativos. Bajo tales condiciones, el pacto omnilateral puede ser calificable como norma estatutaria en sentido sustantivo en el seno de las sociedades corporativas que, como tal, tendría validez y eficacia entre la sociedad y todos sus socios al amparo del contenido esencial del derecho fundamental de asociación ex art. 22 CE, mientras el pacto omnilateral siga siendo tal. Bajo tal amparo constitucional, el pacto omnilateral cumple la función de permitir la creación y organización de sociedades de capital atípicas en el ámbito interno o relativo a las relaciones entre la sociedad y sus socios, permitiendo la máxima personalización de la sociedad de capital. Al ser norma estatutaria en sentido sustantivo, el pacto omnilateral queda al margen de la regla de la inoponibilidad ex art. 29 LSC y debería permitir fundar la estimación o desestimación de acciones de impugnación de acuerdos sociales sobre la base de la causa relativa a la infracción de los estatutos sociales ex art. 204.1 LSC.

  • English

    Exposure and critique treatment of the Supreme Court’s doctrine on the so-called omnilateral shareholder agreements. The omnilateral shareholder agreement, being agreed unanimously by all the partners of the company, does not respond to the general criteria of doctrinal characterization of shareholder agreements, so it does not seem correct to treat it according to such general criteria. For this reason, it may be appropriate to distinguish between typical shareholder agreements (those related to the organization of the corporate relationship and the rights and obligations of the partners as such) and the atypical ones. If the former —typical— are signed by all the partners unanimously, the shareholder agreement is a real and effective social agreement as long as it does not go beyond the limits of art. 1255 CC, even if they modify or exclude non-fundamental imperative rules (or public order) of the specific regime of the social form to which they are related. Under such conditions, the omnilateral agreement can be qualified as a statutory norm in a substantive sense within corporate companies that, as such, would be valid and effective between the company and all its partners under the protection of the essential content of the fundamental right of association ex art. 22 CE, as long as the omnilateral pact continues to be so. Under such constitutional protection, the omnilateral agreement fulfills the function of allowing the creation and organization of atypical capital companies in the internal sphere or relative to the relations between the company and its partners, allowing the maximum personalization of the capital company. Being a statutory norm in a substantive sense, the omnilateral agreement is outside the rule of unenforceability ex art. 29 LSC and should allow the estimation or dismissal of actions to challenge corporate resolutions to be founded on the basis of the case related to the infringement of the corporate bylaws ex art. 204.1 LSC.