Ha sido costumbre analizar la lluvia aprovechable para los cultivos mediante lo que se considera la lluvia efectiva, que se obtiene como resultado de la aplicación de un coeficiente elaborado en función del valor de la lluvia registrada que cae en un periodo determinado, sin tomar en cuenta su intensidad, ni la capacidad de infiltración, retención y humedad existentes en los suelos. Se logran resultados muy diferentes si se consideran estos elementos para calcular la humedad disponible en el suelo durante todo el año. El método que a continuación se expone toma en cuenta los factores antes mencionados para obtener la humedad disponible en los suelos, a fin de aprovecharlos en la agricultura.
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