Paloma Calero Martín de Villodres
Es un hecho bien conocido que en cualquier trabajo las anécdotas son recurrentes, por lo que nuestra profesión no iba a ser menos y más cuando está marcada por un grado elevado de estrés, presión y dificultad, donde el trato enfermera-paciente se convierte en algo más que una relación contractual y donde el hecho de ser sanitario nos convierten en poco más que “superhéroes” de cualquier disciplina relacionada con la salud [continuar leyendo en el PDF].
© 2001-2024 Fundación Dialnet · Todos los derechos reservados