La ley 9/2017, de 8 de noviembre, de Contratos del Sector Público incorpora una regulación legal mucho más rigurosa y exigente de la figura del encargo a medio propio en comparación con la normativa precedente; más ambiciosa, en algunos aspectos, que la propia regulación de la Directiva 2014/24/UE. Un aspecto esencial en esa nueva regulación lo constituye el límite de las prestaciones que el medio propio puede encargar a terceros, que se fijó en un 50%, con determinadas excepciones ya incorporadas en la redacción original de la LCSP, y posteriormente ampliadas. No obstante, existe la posibilidad, según el criterio de la doctrina y diferentes pronunciamientos de órganos consultivos, de articular la actividad de dichos entes instrumentales mediante la transferencia de competencias como técnica de reorganización administrativa
Spanish Public Procurement Law 9/2017, about Contracts of the Public Sector, set out a much more demanding regulation regarding the award of a public contract by a contracting authority to a legal person governed by private or public law compared to the previous legislation, going even further than the Directive 2014/24/UE in certain issues. A key aspect is the limit of activities to be entrusted by that legal person to third parties limited to 50%, with some exceptions initially regulated and some added later. Nevertheless, according to the doctrine and opinions of consultative bodies, it is feasible to articulate the activity of those legal persons by a transfer of powers as a technique of administrative reorganization
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