No será antes del verano porque "no es urgente, es un asunto de trámite". Así que, probablemente, "deberá esperar a octubre". No mucho más. Entonces, sí: la Sala Segunda del Tribunal Supremo decidirá la conveniencia -o no- de solicitar, a través de suplicatorios, el procesamiento de Alfonso Guerra, José Barrionuevo y Eduardo Martín Toval como presuntos implicados en un delito de "perturbación de la vida democrática de un partido" y "revelación de secretos". Eso que, de tejas abajo, hemos convenido en llamar "espionaje político".
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