Resumen de La naturaleza como víctima ante la perpetración de delitos penales ambientales

Yeriny del Carmen Conopoima Moreno

• español

  La concepción de naturaleza como sujeto de derechos, está plasmada en la Constitución ecuatoriana, surgiendo ante la necesidad de proteger el medio ambiente, ante los ataques de los cuales ha sido víctima, teniendo la intención de garantizar la protección del ambiente, y otorgar beneficios a los seres humanos que habitan el planeta, ya que al sufrir menoscabo los ecosistemas, ello redunda en graves perjuicios a la humanidad. Dentro de esta concepción de defensa de la naturaleza y exigibilidad de sus derechos, tal como lo establece la Constitución del Ecuador, no puede dejar de mencionarse la existencia de sanciones penales, partiendo del hecho que la tutela penal ambiental brinda protección a los distintos elementos que conforman la naturaleza, como sería, el aire, aguas, suelos, flora y fauna. Ahora bien, el derecho penal ambiental, se focaliza en los intereses colectivos vinculados con los elementos que conforman el ambiente con la finalidad de obtener un auténtico sistema de justicia ecológica, centrado en atender los perjuicios ocasionados al medio ambiente y la consecuente generación de un número indeterminados de víctimas de la colectividad. Tales planteamientos conducen a formular como propósito de este artículo, describir a la naturaleza como víctima ante la perpetración de delitos penales ambientales. De hecho, es innegable la necesidad de proteger la naturaleza, mediante el derecho que posee y en atención al derecho que tiene el hombre a un medio ambiente adecuado, lo que lleva paralelamente el reconocimiento y configuración de sanciones penales ambientales, ante las acciones tipificadas como delitos ecológicos.Palabras clave: Naturaleza, sujeto de derecho, delitos penales ambientales.

• English

  The conception of nature as a subject of rights, is embodied in the Ecuadorian Constitution, arising from the need to protect the environment, in the face of the attacks of which it has been a victim, with the intention of guaranteeing the protection of the environment, and granting benefits to the human beings that inhabit the planet, since by suffering ecosystems are undermined, this results in serious damage to humanity. Within this conception of defense of nature and enforceability of its rights, as established by the Constitution of Ecuador, the existence of criminal sanctions cannot be ignored, based on the fact that environmental criminal protection provides protection to the different elements that make up nature, as it would be, the air, water, soil, flora and fauna. However, environmental criminal law focuses on the collective interests linked to the elements that make up the environment in order to obtain an authentic ecological justice system, focused on addressing the damage caused to the environment and the consequent generation of a number indeterminate victim of the community. Such approaches lead to the formulation of the purpose of this article, to describe nature as a victim in the face of the perpetration of environmental criminal offenses. In fact, the need to protect nature is undeniable, through the right that it possesses and in attention to the right that man has to an adequate environment, which parallels the recognition and configuration of environmental criminal sanctions, in the face of actions typified as ecological crimes.