En 1961 Luis Cubillo de Arteaga proyectó, por encargo de la Dirección General de Asuntos Eclesiásticos, el Seminario de Castellón, edificio que se convirtió en uno de los hitos de la arquitectura religiosa de su autor.En el Seminario de Castellón la importancia del cliente fue capital. Se creó un equipo de trabajo con libertad absoluta de sugerencias y de críticas, que Cubillo incorporó con éxito a su proyecto. Existió una comunicación muy fluida entre el arquitecto y cliente a través de abundante correspondencia y de visitas del obispo Josep Pont i Gol al estudio de Cubillo.El Seminario supuso una importante aportación tipológica a la arquitectura religiosa española, tanto por lo novedoso del planteamiento del conjunto como por la organización interior del templo, anticipándose a lo que el Concilio Vaticano II iba a propugnar pocos años después.
In 1961 Luis Cubillo de Arteaga designed, commissioned by the General Directorate of Ecclesiastical Affairs, the Seminary of Castellón, a building that became one of the landmarks of its author’s religious architecture.In the Seminary of Castellón the importance of the client was huge. A work team was created with absolute freedom of suggestions and criticism, which Cubillo successfully incorporated into his project. There was very fluid communication between the architect and the client, through abundant correspondence and visits by Bishop Josep Pont i Gol to the Cubillo office.The Seminary made an important typological contribution to Spanish religious architecture, both because of the novelty of the complex conception and because of the interior organization of the temple, anticipating what the Second Vatican Council was going to support a few years later.
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