El tacógrafo, también conocido como “caja negra”, es un dispositivo cuya función consiste en registrar datos sobre la marcha del vehículo donde está instalado, el tiempo de conducción, kilómetros recorridos, la velocidad, las pausas, los periodos de descanso y los periodos de otros trabajos realizados por el conductor. La implantación del tacógrafo tiene objetivo ayudar a hacer cumplir las normas sobre los tiempos de conducción y los periodos de descanso y controlar los tiempos de conducción de los conductores profesionales con el fin de evitar la fatiga y, por ende, la seguridad vial. En este trabajo pretende profundizar en el estudio de la actual doctrina jurisprudencial dimanada del Tribunal Supremo, en cuanto al reproche penal que la manipulación de los tacógrafos merece, procurando confirmarse que mediante el endurecimiento penal de la normativa se mejorarán los principales indicadores de la seguridad vial
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