Hay una frase reciente de Carlos Luis Álvarez, Cándido, que es uno de los escritores contemporáneos de periódicos que admiro, que me ha impresionado, y la he elegido como comienzo de esta crónica como invitación a lo que voy a decir. Es ésta: "Mi drama está en que, siendo periodista, jamás he sentido la necesidad de contar nada a nadie". No veo la necesidad, la exigencia, o el oficio de escribir, sin contar algo. Mi situación ha sido diferente, tal como que mi drama ha consistido en que siendo periodista muchas veces no he podido, o no he querido, o no me han dejado, contar lo que tenía que decir a mis lectores.
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