La Convención Interamericana Contra la Corrupción de 1996 fue el primer tratado firmado para combatir la corrupción en el ámbito transnacional. La Convención fue adoptada debido al creciente interés de la Organización de los Estados Americanos en proteger la democracia en la región, particularmente en relación con la corrupción y otros vicios de los gobiernos electos. En ese sentido, la Convención promueve la convergencia de los marcos nacionales anticorrupción y la cooperación internacional en casos de corrupción transnacional. Para mejorar su eficacia, en 2001, la Organización creó un Mecanismo de Seguimiento basado en la cooperación técnica y consensuada. En 2016 se dio un paso más con la creación de la Misión de Apoyo a la Lucha contra la Corrupción y la Impunidad en Honduras, la cual fue terminada en 2020 por el Gobierno de Honduras para proteger la soberanía nacional. La Convención demuestra que la mayor debilidad de las respuestas supranacionales a la corrupción es la falta de mecanismos internacionales de aplicación. Para hacer frente a esa situación, la Organización de los Estados Americanos ha creado instrumentos flexibles para supervisar el cumplimiento de la Convención basados en la cooperación y colaboración de los Estados. Sin embargo, la defensa de la soberanía nacional (debido al principio de no intervención) y la fragilidad del Estado para implementar políticas anticorrupción han creado nuevos desafíos.
The 1996 Inter-American Convention Against Corruption was the first treaty signed to tackle corruption at a transnational level. The Convention was adopted due to the increasing interest of the Organization of American States to protect democracy in the region, particularly against corruption and other vices of elected Governments. In that sense, the Convention promotes the convergence of national anti-corruption frameworks and international cooperation in transnational corruption cases. To improve its effectiveness, in 2001, the Organization created a Follow-up Mechanism based on consensual and technical cooperation. In 2016, a further step was adopted with the creation of the Mission to Support the Fight Against Corruption and Impunity in Honduras, which was terminated in 2020 by the Honduran Government to protect national sovereignty. The Convention demonstrates that the greatest weakness of supranational responses to corruption is the lack of international enforcement mechanisms. To address this situation, the Organization of American States has created flexible instruments to supervise the fulfillment of the Convention based on the cooperation and collaboration of the states. However, the defense of national sovereignty (due to the non-intervention principle) and the State’s fragility to implement anti-corruption policies have created further challenges.
© 2001-2024 Fundación Dialnet · Todos los derechos reservados