En la crítica cervantina el bandolero catalán Roque Guinart se ha considerado un héroe romántico ¿valiente, magnánimo y aun trágico¿ que eclipsa al mismo Don Quijote.
Este artículo mantiene que el personaje y el episodio requieren una interpretación más bien irónica que romántica. Principalmente por medio de una técnica de eufemismo irónico Cervantes sustituye un término explícito que denota la realidad violenta de la vida de Roque (¿ladrón,¿ ¿robo,¿ ¿repartir botín¿) por un término que intenta legitimarla (¿caballero,¿ ¿limosna,¿ ¿hacer justicia distributiva¿). Don Quijote y los viajeros asaltados por Roque aceptan esta sustitución eufemística, y por lo tanto quedan ciegos ante la injusticia de la que son víctimas.
Roque Guinart no es un caballero andante manqué, como cree Don Quijote (y como han sostenido varios críticos cervantinos) sino ¿ladrón conocido¿ perdido en el laberinto de su propio mito.
© 2001-2024 Fundación Dialnet · Todos los derechos reservados