La provincialización de Santa Cruz en 1957 señaló cambios en su política educativa evidenciados en la promoción del existente sistema educativo y la conformación de niveles y modalidades inexistentes, como fue el caso de la educación rural.
Esta modalidad tuvo que enfrentarse a varios factores: un territorio sumamente extenso y despoblado, una explotación ovina extensiva que requería de poca mano de obra estable y la experiencia de los padres de los escolares que debían enviarlos lejos del hogar para que recibieran educación formal. Lo novedoso fue el interés del Estado por brindar educación a todos los niños e instalar una escuela “argentinizadora” en las zonas limítrofes con Chile.
Podríamos caracterizar a estas escuelas como de “gestión mixta”: lo académico estaba reglamentado por el Estado que se hacia cargo de la designación y salario del docente, la provisión, supervisión y certificación de los planes de estudio; mientras que la infraestructura educativa estaba solventada por la estancia donde estaba instalado el establecimiento.
Podríamos decir entonces que, en sus inicios, la Educación Rural de Santa Cruz fue la continuadora, y superadora, de la educación – privada - que se había brindado en el hogar a los niños de las zonas rurales.
© 2001-2025 Fundación Dialnet · Todos los derechos reservados