Si tiene usted multas de tráfico o aparcamiento sin pagar y guarda sus ahorros en un banco, prepárese para lo peor: en las últimas semanas, y a la vista de que no hay forma de conseguir que se paguen las multas de forma voluntaria, el Ayuntamiento de Madrid ha reiniciado su ofensiva de embargar las cuentas corrientes de los infractores. Mientras algunas asociaciones protestan porque consideran que no se siguen los trámites legales y las multas no se notifican correctamente, la picaresca ha hecho su aparición y numerosos madrileños han encontrado la fórmula para evitar el embargo.
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