El 7 de diciembre de 1924, cunado frisaba los cuarenta años de edad, fallecía en Toledo este pintor a causa de una repentina y fulminante enfermedad. Aprendiz en el obrador del Greco, su formación se completó con una estancia en Italia entre 1606 y 1612, de la que volvió para instalarse , ya con taller propio, en la ciudad imperial, donde se forjó su fama que le sobrevivió durante mucho tiempo, hasta que , en el siglo XX, la sombra de la recuperada relevancia de su maestro opacó su figura. Así, el cuarto centenario de su muerte se ha revelado como un momento idóneo para reivindicar la trascendencia de su dimensión artística y creativa en la historia de la pintura española, y es por ello que le dedicamos un exhaustivo Dosier, elaborado por un nutrido grupo de especialistas, en el que se abordan todos los temas clave para conocer a fondo la vida y la obra de uno de los grandes pintores del primer cuarto del siglo XVII en España
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