Valeria Herrera Rojas, Michelle Montero Quesada, Jose Julián Picado Morales, Magally María Sanabria Brenes, Frank Carlos Barrientos Alfaro
Los hongos juegan un papel clave en el mantenimiento de la vida en la tierra, ya que desempeñan múltiples funciones a nivel ecológico. Adicionalmente, son productores de diversos metabolitos secundarios, entre estos, los alcaloides, los cuales en ciertos casos pueden proveer propiedades alucinógenas. Psilocybe cubensis es una especie común de hongos alucinógenos conocida como “hongos mágicos”. Esta especie del filo Basidiomycota, originaria de Mesoamérica, produce alcaloides como la psilocibina y su derivado desfosforilado, la psilocina. Se ha estudiado el potencial de estos compuestos en el tratamiento contra distintas enfermedades como la depresión, la ansiedad, el trastorno de déficit de atención, el estrés postraumático y el trastorno obsesivo-compulsivo. Los hongos que acumulan psilocibina no suelen ser tóxicos para el consumo, pero sí pueden tener efectos colaterales como náuseas, vómito, dolor de cabeza, aumento del ritmo cardíaco y de la presión sanguínea. Dado esto y a limitaciones legales, este hongo y sus compuestos no se encuentran inmersos en el mercado; sin embargo, nuevas investigaciones demuestran su potencial y evidencian la necesidad de considerar su comercialización
Fungi play a key role in maintaining life on Earth, as they perform multiple ecological functions. Besides, they are producers of various secondary metabolites, among these, alkaloids, which in certain cases can provide hallucinogenic properties. Psilocybe cubensis is a common species of hallucinogenic mushrooms known as “magic mushrooms”. This species of the phylum Basidiomycota, native to Mesoamerica, produces alkaloids such as psilocybin and its dephosphorylated derivative, psilocin. The potential of these compounds in the treatment of various illnesses such as depression, anxiety, attention deficit disorder, post-traumatic stress disorder, and obsessive-compulsive disorder has been studied. Mushrooms that accumulate psilocybin are usually not toxic for consumption, but they can have side effects such as nausea, vomiting, headache, increased heart rate, and blood pressure. Given this and legal limitations, this mushroom and its compounds are not available in the market; however, new research demonstrates their potential and why their commercialization should be considered.
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