El pasado mes de noviembre, por causas actualmente bajo investigación, el Radomo del EVA 22 resultó destruido, dañando en su caída las antenas de los radares, dejándolos fuera de servicio. Esta instalación juega un papel relevante en la defensa aérea del territorio nacional. Además contribuye, con la información que obtiene, al control de la circulación aérea general en el archipiélago canario. El presente artículo ofrece un relato de cómo el Ejército del Aire, con el MACOM/JSMC y MALOG/DIS/SEMCO coordinando el proceso, hizo frente a esta situación, y la actuación de los distintos organismos y unidades que intervinieron para restablecer, en un tiempo récord, la vigilancia radar que realiza dicho EVA.
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