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Resumen de Calidad de la dieta en España e impacto en salud

Aurora Norte Navarro

  • Introducción y antecedentes: La calidad de la dieta está directamente relacionada con la seguridad alimentaria en sus 3 componentes principales: disponibilidad, acceso y aprovechamiento biológico de los alimentos. Dicha calidad se puede valorar mediante la construcción de indicadores o índices, que evalúan la calidad global basándose en los conocimientos actuales de la nutrición, teniendo en cuenta si el consumo de la población se adecua o no a las recomendaciones dietéticas.

    Existe una gran preocupación por los posibles resultados de la crisis económica sobre la salud, debido principalmente a las políticas de austeridad que los gobiernos han llevado a cabo durante este periodo. La importancia de los factores sociales y ambientales en la salud de las personas y de las poblaciones hace necesario el desarrollo de estudios que evalúen el impacto de la crisis sobre la salud. Por lo tanto el análisis de los datos que recogen las Encuestas Nacionales de Salud (ENS) más recientes llevadas a cabo en los años 2006 (periodo sin crisis económica) y 2012 (periodo de crisis económica), permite una primera aproximación al impacto de la crisis económica sobre la calidad de la dieta de la población española e indirectamente sobre su salud.

    El objetivo general de esta tesis es describir los cambios en los patrones dietéticos y valorar la calidad de la dieta de la población adulta española en dos períodos de tiempo caracterizados por cambios económicos. Se desarrollan los siguientes objetivos específicos: - Determinar la calidad de la dieta de la población adulta española a partir de la elaboración del Índice de Alimentación Saludable (IASE), y su relación con características geográficas y socioeconómicas en 2006.

    - Analizar la asociación entre el consumo de alimentos y la presencia de sobrepeso y obesidad a partir de los datos recogidos en la Encuesta Nacional de Salud del año 2006 realizada en España.

    - Evaluar los cambios en la calidad de la dieta y en el estado nutricional de la población adulta española de los años 2006 y 2012.

    - Analizar la asociación de la alimentación poco saludable y la obesidad con las variables socioeconómicas de la población adulta española en los años 2006 y 2012.

    - Evaluar el impacto de la crisis económica sobre la calidad de la dieta en España.

    Método: Para la consecución de dos primeros objetivos se construyó una base de datos donde se incluyeron variables sociodemográficas y de consumo de alimentos a partir de los datos recogidos en la ENS de 2006. La calidad de la dieta se evaluó mediante la construcción del IASE. Dicho índice se basó en una modificación de la metodología del Healthy Eating Index norteamericano, adaptándolo a las recomendaciones de las Guías de Alimentación de la población española. Se realizaron análisis descriptivos y comparativos, a través de contraste de diferencias de proporciones y tasas de variación, además se llevó a cabo un análisis de asociación mediante regresión logística.

    Para la consecución del tercer y cuarto objetivos se realizó un estudio comparativo entre dos periodos de tiempo diferentes económicamente. Se construyó una nueva base de datos similar a la anterior, con los datos de la ENS del año 2012. Se incorporó en ambas bases de datos una nueva variable referente a la situación laboral. Se realizó un análisis descriptivo de cada una de las variables a estudio en ambos periodos de tiempo, además se analizó la asociación entre los cambios en las condiciones socioeconómicas y los factores relacionados con la salud por medio de una regresión logística.

    Para la consecución del quinto objetivo se utilizaron las bases de datos creadas para la consecución de los objetivos anteriores. Se calculó la tasa de variación de la categoría saludable del IASE y los porcentajes de cada una de las categorías de las variables incluidas (clase social, nivel de estudios y situación laboral). Con estas nuevas variables se creó una tercera base de datos a la que además se le incorporaron las variables: comunidad autónoma de residencia, tasa de desempleo y Producto Interior Bruto, de los mismos años a los que hacen referencia las ENS. Se realizó un análisis descriptivo entre las variables socioeconómicas y el IASE para cada año, también se calcularon las correlaciones simples de la tasa del IASE con cada una de las variables socioeconómicas. Mediante el modelo de regresión lineal se calculó el coeficiente de determinación que recoge el influjo de la crisis económica y los efectos parciales leídos por los betas de cada uno de las variables económicas y sociales.

    Todos los análisis se realizaron con el programa Excel y el paquete estadístico SPSS.

    Resultados: La crisis económica influye en la probabilidad de padecer obesidad y de tener una dieta poco saludable. Estas situaciones están condicionadas por variables socioeconómicas que han cambiado durante los años de crisis. Más de 70% de la población adulta española necesita cambios en su alimentación. Los hombres tienen una dieta menos saludable que las mujeres. Además las personas con un bajo nivel de educación, así como las personas con trabajos manuales presentaron una mayor prevalencia de obesidad en ambos años, unida a una mala calidad de la dieta.

    En ambos años, la probabilidad de padecer obesidad aumenta en la población con bajos niveles de educación y en las clases sociales con trabajos manuales. En 2006, las personas con trabajos manuales no cualificados tenían un 54% de probabilidad de padecer obesidad, mientras que en 2012 esta probabilidad aumentó hasta el 120% (IC 95% 2006: 1,42-1,67; IC 95% 2012: 2,11-2,33).

    Entre todos los factores socioeconómicos estudiados, la situación del empleo ha sido descrita por otros autores como una de las variables más relacionadas con la crisis económica, tal como se evidencia en el presente trabajo, esta variable también mostró estar influenciada por la crisis financiera española.

    Las personas que se dedican a las labores del hogar y la población sin ingresos fijos fueron las categorías relacionadas con la situación laboral que mostraron mayores porcentajes de casos de sobrepeso y obesidad. Si en 2006 no tener ingresos fijos no suponía un riesgo de ser obeso, en 2012 aumenta la probabilidad hasta un 26%. La misma relación se ha encontrado para los hábitos alimenticios sanos, lo que se traduce en un aumento del riesgo de alimentarse poco saludable.

    En el año 2006 más del 80% de la población española excedía el consumo recomendado de dulces, embutidos y fiambres. Al comparar los dos periodos, cabe destacar que ha disminuido el consumo diario de refrescos azucarados (16,5%), dulces (9,3%), embutidos y fiambres (13,7%), pescados (25,3%), huevos (27,6%), carnes (24,3%), lácteos (3,1%), pan y cereales (3,2%), legumbres (39,6%), pasta, arroz y patata (16,0%), fruta fresca (4,8%); y ha aumentado el consumo diario de verduras y hortalizas (5,6%). Es evidente que se ha producido un cambio en el consumo y por tanto en el IASE y que estos cambios están directamente influenciados por las modificaciones que han sufrido las variables socioeconómicas durante los tiempos de crisis. El 84,7% de la tasa de variación de las personas con alimentación saludable es explicado por todas las variables incluidas en el modelo de regresión lineal Los resultados demuestran que el factor económico en España ejerce una gran influencia sobre la elección y consumo de alimentos, ofreciendo patrones distintos antes y durante la crisis económica. Estas modificaciones no afectan únicamente a la selección de alimentos, sino también a la salud de los consumidores. Cabe señalar que las condiciones de vida de la población española se han deteriorado y que las desigualdades en la obesidad y la calidad de la dieta han aumentado con la crisis. Es necesario aplicar urgentemente medidas de política que luchen contra estas desigualdades. De lo contrario, tendrán un impacto negativo en la salud de las generaciones futuras. También es importante vigilar y evaluar el impacto de las políticas públicas dirigidas a superar la crisis.

    Conclusiones: El IASE es una herramienta válida para la estimación global de la calidad de la dieta de una manera cualitativa.

    La crisis económica sufrida en España a partir del año 2008 ha modificado diversas variables socioeconómicas que a su vez han influenciado el consumo de alimentos y con ello la calidad de la dieta. La situación laboral y la clase social son las variables socioeconómicas relacionadas con la obesidad que más han cambiado durante la recesión económica en España, mientras que sobre la alimentación poco saludable ha sido la situación laboral. Los cambios derivados de las medidas de austeridad puestas en marcha por el gobierno durante la época de crisis en España, requieren de la evaluación del impacto en la salud de la población, que actualmente no se está realizando. Por lo tanto, el IASE es una herramienta útil y adecuada para evaluar el impacto en salud de las políticas implementadas por el gobierno durante la crisis.

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