La Tesis tiene dos objetivos: descubrir qué pudo aprender un feligrés de la archidiócesis de Madrid sobre derechos humanos, opción por los pobres y la realidad de las migraciones de cada uno de los arzobispos que ha tenido la archidiócesis después del Concilio Vaticano II, Casimiro Morcillo, Vicente Enrique y Tarancón y Ángel Suquía y hacer un análisis comparativo entre las enseñanzas de los tres arzobispos. No estudiamos al actual arzobispo, Rouco Varela, por estar abierto su magisterio, . Hablamos del magisterio referido a la archidiócesis y sus feligreses. No entramos a estudiar sus enseñanzas o intervenciones dirigidas a otros foros o instituciones. A lo largo de la tesis descubrimos que los tres arzobispos son hijos de su tiempo, conocen bien la realidad social y política que les rodea y se preocupan por ella, iluminándola desde la Palabra de Dios y el magisterio conciliar y pontificio. Demuestran una gran sensibilidad ante los problemas sociales y políticos y desarrollan los temas con una enorme coincidencia entre ellos a la hora de fundamentarlos teológicamente. La mayor diferencia entre ellos está en el silencio de D. Casimiro ante los derechos políticos. Escriben con abundancia y profundidad sobre la realidad sociopolítica de su tiempo, iluminándola adecuadamente desde la fe, y favoreciendo el compromiso eclesial. Los tres subrayan la dimensión sociopolítica de la fe y del ser creyente. Para ellos el compromiso sociopolítico está íntimamente relacionado con la evangelización. Su magisterio, en cuanto a su fundamentación e invitación al compromiso eclesial se refiere, es perfectamente actual y válido.
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