En el S. XX surgen una gran cantidad de tendencias que suponen una ruptura radical con la tradición artística i que aportan nuevas i variadas visiones del mundo.
Es fácil constatar como frecuentemente, este tipo de arte genera rechazo lo que hace imposible la comunicación entre el artista i el espectador.
Este trabajo tiene como eje la experimentación i posterior validación de un programa destinado a la educación de adultos entorno al arte del S. XX, en el convencimiento de que la observación del arte en el museu como recurso didáctico, además de ofrecernos un placer no comparable a ver una reprodución, nos facilita la comunicación así como la comprensió estética de la obra.
El trabajo de campo se ha centrado en la obra bidimensional última de Miró, i la sede de la observación ha sido el denominado Espai Miró, que comprende sus talleres, la casa donde vivió, i el edificio diseñado por Moneo que es adonde se ubican las salas de exposición i el centre documental.
En cuanto a la metodología la opción ha sido la de un diseño casi experimental con un único grupo de tratamiento, con pruebas pre-test i post-test. Se ha hecho servir una técnica intrasujeto, de tal manera que los individuos que participaron en la búsqueda se mantuvieron en un solo grupo. La estrategia de análisis se basa en la comparación de las respuestas i valores adquiridos por cada sujeta en ambas pruebas.
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