Utilidad de los ultrasonidos para el cribaje de la osteoporosis

• Autores: María Mercedes Suárez Cabrera
• Directores de la Tesis: Manuel Sosa Henríquez (dir. tes.), Pedro Saavedra Santana (dir. tes.)
• Lectura: En la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria ( España ) en 2016
• Idioma: español
• Tribunal Calificador de la Tesis: Cecilia Dorado García (presid.), Felix Lopez Blanco (secret.), Nery Sablón González (voc.), Diego Hernández Hernández (voc.), Pedro Peña Quintana (voc.)
• Materias:
  • Ciencias médicas
    • Patología
      • Osteopatología
• Enlaces
  • Tesis en acceso abierto en: acceda
• Resumen

  • Introducción: La osteoporosis es la enfermedad metabólica ósea más frecuente. Su complicación clínica es la fractura. La densitometría ósea es el método diagnóstico clínico por excelencia y predice el riesgo de fracturas, pero es cara y su accesibilidad está restringida. La ultrasonografía cuantitativa es más accesible y barata.

    Objetivo: Encontrar un método alternativo a la densitometría para la estimación del riesgo de fracturas por fragilidad: vertebrales y totales.

    Pacientes y Método: Se incluyeron 1.132 mujeres postmenopáusicas atendidas en la Unidad Metabólica Ósea del CHUIMI. Se evaluaron variables epidemiológicas, clínicas, y antropométricas. Se realizó densitometría ósea y ultrasonografía cuantitativa de calcáneo. Se realizó análisis estadístico.

    Resultados: Los valores de QUI mayores de 88,5 en mujeres postmenopáusicas se asociaron con un riesgo muy bajo de fracturas por fragilidad, considerando las fracturas de forma global, con sensibilidad del 93,5% y valor predictivo negativo de 96,4%.

    Los valores de QUI mayores de 90,5 se asociaron con un riesgo muy bajo de fracturas vertebrales, con sensibilidad del 80,3% y valor predictivo negativo del 94 %. El 43,1% de las mujeres presentó un valor QUI mayor de 88,5; y el 32,8%, mayor de 90,5.

    Conclusiones: La ultrasonografía cuantitativa en el calcáneo mostró capacidad para proporcionar un valor umbral óptimo, donde el riesgo de sufrir una fractura por fragilidad, consideradas globalmente, o sólo vertebral, sea muy bajo. En un porcentaje considerable de las mujeres postmenopáusicas podría evitarse la realización de la densitometría, dado que su riesgo de fracturas por fragilidad es muy bajo. Esta prueba puede ser una alternativa a la densitometría.