La evolución de las disparidades provinciales en España viene caracterizada por un intenso proceso en la reducción de las mismas hasta finales de los años setenta. Desde esa fecha, la convergencia prácticamente se ha detenido y las diferencias desde entonces han tendido a estabilizarse.
La hipótesis central que se defiende en la tesis es que en este proceso el cambio estructural de la económica española, desigual por provincias, resulta un elemento básico a la hora de explicar la evolución de la convergencia real en productividad y en renta por habitante. La transición desde una economía fundamentalmente agraria, característica básica de la realidad española de los cincuenta hacia una economía de los servicios se ha trasladado al plano provincial de manera diferente facilitando el proceso de acercamiento en los niveles de productividad.
Una parte central de la tesis se destina al análisis del cambio estructural en las provincias españolas que permite la caracterización de varios grupos atendiendo tanto a la especialización como al cambio que se produce en la misma. La presencia de actividades ligadas al sector publico junto con actividades industriales de baja tecnología en unas provincias contrasta con patrones de especialización de otras provincias caracterizadas por la terciarización, especialmente en el ámbito del empleo.
Lo anterior ha influido en el crecimiento provincial. El uso de la técnica shitf-share y de modelos econométricos con variables ficticias a través de la realización de ejercicios de estimación de economías virtuales ha permitido calibrar la importancia de la especialización productiva provincial en el proceso de crecimiento en el Valor añadido y el empleo. Los resultados muestran que las economías mas diversificadas o con una presencia mas importantes del sector servicios han experimentado tasas de crecimiento mas elevadas configurándose como las mas dinámicas y concentrando, por ende, gran parte del empleo y de la población española. No obstante, este fenómeno de concentración de la actividad económica ha supuesto, simultáneamente, un acercamiento en los niveles de eficiencia de las provincias si medimos estos a través del indicador de la productividad aparente de trabajo. La fuerte concentración del empleo en las provincias más dinámicas, fruto de una terciarización mas intensa que en el resto, conlleva que sus avances en productividad hayan sido mas modestos. Aun así, todavía siguen manteniendo unos niveles de equilibrio a largo plazo superiores al resto, que además, tiende a mantenerse con el paso del tiempo. Estos resultados se deducen de la estimación de ecuaciones de convergencia utilizando la econometra de datos de panel aislando específicamente la contribución del cambio estructural a la convergencia en productividad. En definitiva, el cambio estructural de la economía española, desigual por provincias, ha permitido en el pasado un acercamiento de los niveles de productividad, aunque también ha supuesto que se produzcan fenómenos de concentración de la actividad productiva, del empleo y de la población, relegando a determinadas provincias a una situación de atraso relativo que parece no tener indicios de cambiar.
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