La empresa informativa como empresa de tendencia la incorporación de los principios editoriales
- Autores: Gonzalo Robles
- Directores de la Tesis: Ángel Arrese Reca (dir. tes.)
- Lectura: En la Universidad de Navarra ( España ) en 2006
- Idioma: español
- Tribunal Calificador de la Tesis: Alfonso Nieto Tamargo (presid.), José Francisco Sánchez Sánchez (secret.), Rafael Alvira Domínguez (voc.), Alfonso Sánchez-Tabernero (voc.), Ignacio Bello (voc.)
- Materias:
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- Resumen
LA EMPRESA INFORMATIVA COMO EMPRESA DE TENDENCIA:LA INCORPORACIÓN DE LOS PRINCIPIOS EDITORIALES.
RESUMEN: En primer lugar, se ha estudiado el contexto histórico, las características y concepto de empresa de tendencia, definida en esta investigación como una organización que satisface necesidades educativas o informativas mediante un servicio ideológicamente determinado, cuya oferta pública, por la que puede obtener beneficio económico, contribuye a la existencia de pluralismo en una sociedad. Desde el punto de vista del trabajo en estas organizaciones, su característica fundamental es la necesidad que tienen sus miembros de incorporar personalmente los principios ideológicos que determinan su servicio. Aplicando esta definición a la empresa informativa, se concluye que ésta puede considerarse propiamente como empresa de tendencia, lo cual tiene consecuencias respecto de su organización y funcionamiento, así, se ha identificado la existencia de una especial responsabilidad directiva en la materialización de los principios editoriales, de la que se deducen dos manifestaciones importantes para la acción directiva en la empresa informativa: por una parte, la exigencia de lograr que los contenidos del servicio informativo respondan a los principios con los que la empresa se ha comprometido a editarlos; por otra, la obligación de incorporar a la empresa informadores capaces de aplicar sus principios editoriales en la práctica profesional informativa. Esta responsabilidad específica de los directivos de la empresa informativa en la aplicación de los principios editoriales es, en realidad, resultado del reconocimiento de un deber general: el de incorporar los principios editoriales. Este deber, consistente en la realización del servicio comprometido por la empresa informativa de forma coherente con sus principios ideológicos, tiene un doble fundamento. Por un lado, la obligación ante el público de ofrecer el servicio debido, cuestión ya suficientemente tratada. Por otro, la necesaria armonización de los sentidos subjetivo y objetivo del trabajo, que en el caso de la empresa informativa implica la incorporación personal de los principios editoriales. Respecto al sujeto de este deber, obliga a cuantos desarrollan tareas directamente relacionadas con el servicio específico comprometido por la empresa informativa, aunque admite gradaciones en función de la posición en el organigrama y la naturaleza de la prestación laboral. En cuanto a su ejercicio práctico, ha de subrayarse que la interiorización de los fines de la empresa informativa no implica necesariamente una adhesión total a su tendencia, que es, de suyo, difícil, pero sí, al menos, una identificación en lo fundamental con ella. Por tanto, es legítima la existencia de un margen de discrepancia o indiferencia respecto de algunos de los principios editoriales, de extensión diferente en función, sobre todo, de la responsabilidad ejercida en la organización, y que, en todo caso, no puede justificar manifestaciones que lesionen la debida coherencia entre los principios editoriales y los contenidos del servicio informativo
