Esta tesis estudia, de manera fundamentalmente experimental, el refuerzo de forjados de madera existentes al añadirles una capa de compresión conectada. Se han realizado 95 ensayos de vigas a corto plazo y un conjunto de ensayos complementarios. La intención es cruzar un gran número de las variables que intervienen en este tipo de refuerzos.
Como alternativa al método de cálculo que recoge el Anejo B del Eurocódigo 5, el denominado “método Gamma” se ha desarrollado un método que relaciona esfuerzos, tensiones, y deformaciones entre sí mediante leyes de proporción y que enlaza directamente la rigidez de flexión con la rigidez de la conexión. Este método permite no solo proyectar estos refuerzos y peritarlos sino disponer de una herramienta con la que se han seguido paso a paso los ensayos realizados en el laboratorio.
El parámetro que se ha estudiado en los ensayos ha sido el módulo de deslizamiento (rigidez de la conexión), ya que es el que sirve para compararlos entre ellos y con la normativa.
De todos los estudios realizados, los aspectos a destacar son los siguientes: En los refuerzos con capas de compresión de madera microlaminada se ha observado una rigidez superior a lo que establece la normativa.
La colocación de los conectores a 45º prácticamente elimina el deslizamiento, lo que supone una gran mejora en la rigidez y una gran simplificación en el cálculo.
La diversidad de aspectos que intervienen en el diseño de los conectores no queda contemplada en las dos expresiones que emplea la normativa.
El pretensado, entendido como presión entre viguetas y capa de compresión, supone una gran ganancia de rigidez de la conexión, no incluida en la normativa.
Se han encontrado discordancias entre la Norma UNE EN 26891 “Estructuras de Madera. Uniones realizadas con elementos de fijación mecánicos. Principios generales para la determinación de las características de resistencia y deslizamiento”, las expresiones del Eurocódigo 5 y los ensayos realizados.
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