Este trabajo de investigación tuvo por objeto demostrar que gran parte de los conflictos y malentendidos actuales en torno a la restauración arquitectónica, presentes día a día en la sección cultural de los periódicos, podrían haber sido evitados; y comprueba, utilizando una serie de casos-tipo y de casos concretos, además de una radiografía previa de los conceptos implicados en el debate, si es posible determinar en cada caso los límites entre los que el restaurador puede moverse con la seguridad de la certeza científica. La tesis presente trata de demostrar que los conceptos más actuales y relevantes del panorama de la intervención y la teoría de la restauración son los que tienen que ver precisamente con la interpretación y valoración, las cuales se efectúan fundamentalmente en relación a los contenidos históricos de los edificios históricos a proteger.
Hipótesis La presente tesis doctoral parte de tres hipótesis interrelacionadas:
1. Los estudios históricos aplicados a la intervención en el patrimonio arquitectónico, generalmente utilizados como un medio más de conocimiento del edificio con vistas a la emisión de un diagnóstico, pueden ser convertidos, si se realizan y se emplean con la perspectiva adecuada, en una herramienta efectiva para dotar a la intervención arquitectónica de una legitimidad filosófica indiscutible. Ello lograría blindar y justificar ante los ojos de la sociedad las intervenciones que se realizan en los edificios históricos, condenando a la irrelevancia a las múltiples críticas sociales y profesionales a las que inevitablemente la intervención en el patrimonio se encontrará siempre expuesta. Puesto que la conservación y protección del patrimonio son asuntos que competen a la sociedad en su conjunto y se regulan mediante leyes, la consecución de un estatus semejante para las obras de restauración debería constituirse en un objetivo prioritario para la teoría y la práctica de la restauración, que actualmente vuelve a estar sumida en el eclecticismo y la polarización más abiertos.
2. La implementación habitual de los estudios históricos no se lleva a cabo con corrección. La ausencia de fundamento epistemológico con la que se emprende habitualmente, cuando se hace, el conjunto de los estudios preliminares, los invalida inevitablemente desde el mismo principio, haciéndolos incapaces de fundamentar el trabajo de restauración.
3. El poder más vital de los estudios históricos, hasta ahora no asumido como tal por los documentos internacionales y la teoría de la restauración, es el de permitir al equipo de restauración efectuar una valoración fundamentada del edificio como tal patrimonio arquitectónico, lo que proporciona un punto de partida para establecer las premisas de la intervención subsiguiente.
Contenidos Aunque en esta tesis se recogen aportaciones teóricas y ejemplos concretos procedentes de diversos países y tradiciones, en cierta medida el trabajo ha procurado centrarse a modo de epítome en los casos españoles a la hora de esgrimir casos de restauraciones significativas que pudieran ser exhaustivamente analizados y documentados, algunos de los cuales no han sido estudiados ni publicados con anterioridad ni siquiera desde un ángulo general. Mientras que los casos del Pabellón de Barcelona, el Pabellón de 1937, el Teatro Romano de Sagunto y la Cripta Güell se utilizan como elemento de análisis del debate corriente y los fenómenos derivados de la opinión pública y las tendencias teóricas enfrentadas, los casos de la restauración o reconstrucción de la Estación de Petróleos Porto Pí, la Casa de Asturias en Bruselas, el Palacete de Pastrana o el Castillo de Cañada se utilizan como casos de estudios en los que el desconocimiento, las ambigüedades o la identificación de múltiples significados no aparece tan contaminados por el peso de la notoriedad y el escándalo.
Uno de los elementos fundamentales a la hora de decidir los temas de los distintos casos de estudio o tomas de datos ha sido la voluntad de centrarse, para volver lo más significativo posible el discurso acerca de los estudios históricos, en los dominios de lo que ha dado en llamarse “el nuevo patrimonio”: en concreto el patrimonio del Movimiento Moderno, el patrimonio arquitectónico vernáculo, y la preservación y puesta en valor de la “memoria” y las “trazas históricas” que quedan inmejorablemente reflejadas en el caso del “Nuevo Berlín”.
© 2001-2024 Fundación Dialnet · Todos los derechos reservados