Las colecciones botánicas constituyen un registro permanente y bien documentado de la distribución de las plantas en el tiempo y en el espacio. Su utilidad ha evolucionado con el paso del tiempo, desde los primeros herbarios, usados como meras bibliotecas de plantas, hasta la actualidad con nuevos usos para los que no estaban destinados. En esta tesis doctoral se ha evaluado como tales colecciones pueden contribuir a mejorar el conocimiento de la biodiversidad, y se aportan estudios enmarcados en dos disciplinas botánicas: la conservación y la taxonomía.
En el ámbito de la conservación se presenta un primer trabajo de síntesis sobre las múltiples potencialidades de estas colecciones a partir de ejemplos bibliográficos. En otros dos trabajos se ha valorado la representación de la flora amenazada de Cataluña en los herbarios; el primero está basado en las colecciones del herbario BC del Instituto Botánico de Barcelona y el segundo en las de los cinco principales herbarios públicos de Cataluña. En ambos estudios se ha constatado que el nivel de representación de esta flora en las colecciones evaluadas es muy elevado y se ha dado a conocer material inédito que podrá ser de utilidad para la investigación y gestión de esta flora amenazada.
En el ámbito de la taxonomía se presentan dos estudios sobre los taxones propuestos por Carlos Pau (1857-1937) para la flora de Marruecos, para los que se han revisado y documentado las sinonimias y evaluado su tipificación. La designación de los pliegos tipos, en los casos en que ha sido necesario, ha de permitir la estabilización de los nombres para su correcta aplicación.
En conclusión, en esta tesis doctoral se ha buscado poner de relieve la importancia de los herbarios como fuentes de información indispensables para la gestión y conservación de las especies amenazadas, así como para estudios taxonómico-nomenclaturale
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