El síndrome de apneas-hipopneas del sueño (SAHS) es una enfermedad crónica caracterizada por el colapso total (apnea) o parcial (hipopnea) de la vía aérea superior durante el sueño. Estos eventos respiratorios, que pueden producirse repetidas veces durante la noche, provocan episodios de hipoxemia intermitente, un incremento de la actividad neurovegetativa, marcados aumentos de presión intratorácica negativa, y fragmentación del sueño. Estos fenómenos, y en especial la hipoxia intermitente, pueden desencadenar procesos inflamatorios y de estrés oxidativo sistémicos, y están asociados a una serie de consecuencias clínicas cardiovasculares, metabólicas y neurocognitivas, entre otras.
Esta tesis tiene, por un lado, el objetivo de estudiar posibles nuevas implicaciones de la hipoxia intermitente en diferentes sistemas mediante un modelo de ratón de apneas del sueño, y por otro presentar un nuevo modelo experimental basado en la parabiosis para el estudio de los efectos locales y sistémicos de la hipoxia. Se plantean cinco hipótesis: 1) la hipoxia intermitente crónica interacciona con el nivel de testosterona en la inducción de osteoporosis en ratones macho; 2) la hipoxia intermitente crónica induce un proceso inflamatorio en corazón y cerebro de ratones hembra que es modulado por los estrógenos; 3) la hipoxia intermitente crónica induce hipoxia/reoxigención en el tejido del testículo, con consiguiente estrés oxidativo y disminución de la calidad espermática, con el resultado de una reducción de la fertilidad masculina; 4) la hipoxia intermitente crónica produce hipoxia/reoxigenación en el epitelio intestinal, modificando a su vez los microambientes donde habitan las bacterias intestinales y produce cambios en la composición de su microbiota; 5) la parabiosis es un modelo experimental que permite separar los efectos de la hipoxia, continua o intermitente, y diferenciar entre las consecuencias de la hipoxia local y las consecuencias de la hipoxia a nivel sistémico provocada por los mediadores en sangre.
Los datos obtenidos en los estudios que se han llevado a cabo para probar estas hipótesis sugieren que: 1) la hipoxia intermitente per se no altera el metabolismo óseo, aunque para descartar una posible asociación entre éste y el SAHS harán falta más estudios tanto clínicos como experimentales; 2) el impacto del SAHS en las mujeres podría ser modificado por la menopausia y se deben estudiar las consecuencias que éste síndrome puede tener, dada su prevalencia, en esta población; 3) la hipoxia intermitente podría reducir la fertilidad de hombres con SAHS; 4) las consecuencias del SAHS podrían estar en parte moduladas por la alteración en la microbiota intestinal como resultado de la hipoxia intermitente. Para determinar si realmente existe una asociación entre el SAHS y estas nuevas posibles consecuencias, y son clínicamente relevantes, será necesario llevar a cabo estudios con pacientes. Finalmente, se ha mostrado que: 5) los efectos locales y sistémicos de la hipoxia intermitente asociada al SAHS se pueden estudiar de manera aislada mediante el modelo de parabiosis en ratón.
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