Con el objeto de estudiar una nueva metodología que cuantifique la disfunción autonómica en enfermos críticos, económica, sencilla de recoger y fácil de interpretar y que sirva como elemento predictor de gravedad y de mortalidad, hemos valorado la variabilidad de la frecuencia cardíaca (VFC) de las primeras 24 horas de ingreso en UCI, a partir de las frecuencias cardiacas suministradas cada 5 minutos por los sistemas de monitorización ECG en 226 pacientes críticos divididos en dos grupos: 113 ingresados por IAM y 113 por insuficiencia circulatoria o respiratoria aguda.Con los indices de la VFC se confeccionó un sistema de ecuaciones para cada grupo, de forma que al aplicarlo se clasificó correctamente el 95,1% de los pacientes graves y el 36% de los leves con AIM, con una probabilidad de error del 7,1% al considerar que un paciente con IAM evolucionaría sin complicaciones de interés (p=0,06). En la insuficiencia orgánica se clasificaron correctamente el 86,3% de los pacientes graves y el 61,3% de los leves. La probabilidad de error al asignar un paciente a la evolución no complicada fue del 15,5% (p=0,003). Las alteraciones de la VFC, obtenidas a partir de los sistemas de monitorización ECG en la UCI, se correlacionan con alteraciones del SNA ocasionadas por su enfermedad. La alta correlación demostrada entre la presentación de complicaciones y las alteraciones en la VCF indica una importante participación del SNA en la fisiopatología del paciente crítico, conocida en el IAM pero no explorada en la insuficiencia circulatoria y respiratoria agudas.
© 2001-2024 Fundación Dialnet · Todos los derechos reservados