Resumen de Cuantificación de la il-8 y mcp-1 en el edema macular secundario a enfermedad oclusiva venosa
La enfermedad oclusiva venosa es un importante problema de salud que afecta entre 1-2 % de la población. El edema macular es la principal causa de pérdida visual y reducción de la calidad de vida en estos pacientes. Sin embargo, no existe por el momento una alternativa terapéutica eficaz. Algunos tratamientos como la fotocoagulación en rejilla con láser argón puede mejorar levemente el curso de la enfermedad en aquellos pacientes con edema macular isquémico secundario a obstrucción de rama venosa. Otros tratamientos probados como las inyecciones intravítreas o la disección de la adventicia no cuentan con estudios de suficiente valor como para concluir su eficacia. Por ello es importante conocer los mecanismos fisiopatológicos de esta enfermedad, para poder elaborar nuevos tratamientos. En este sentido existen trabajos de investigación que señalan el posible papel de las moléculas mediadoras de la inflamación en el origen del edema macular.
La IL-8 y la MCP-1 perenecen al grupo de las citocinas y participan fundamentalmente en los procesos inflamatorios como el edema cerebral y sus niveles pueden verse aumentados en estados trombóticos.
En el presente trabajo se cuantificaron los niveles de estas IL-8 y MCP-1 en pacientes con obstrucción de rama venosa y obstrucción de vena central de la retina, en muestras de plasma y vítreo y se compararon con los de un grupo control, formado por pacientes con enfermedades de la interfase vitreorretiniana (membrana epiretiniana y agujero macular). Tras la toma de la muestra vítrea, a los pacientes con enfermedad oclusiva venosa, se les realizó una inyección intravítrea de acetónido de triamcinolona (4mg).
Durante el seguimiento se les realizó a todos los pacientes con enfermedad oclusiva venosa retiniana una prueba de OCT para cuantificar el grosor macular central, al mes, a los 3 y 6 meses.
Los resultados del análisis de los datos obtenidos mostraron que existían diferencias estadísticamente significativas en las concentraciones vítreas y plasmáticas en los casos con obstrucción de rama venosa y de vena central de la retina, no encontrándose tales diferencias en el grupo control. Además en los pacientes con enfermedad oclusiva venosa los niveles en vítreo eran superiores a los del grupo control, siendo estas diferencias estadísticamente significativas. No se encontraron diferencias significativas en los niveles de IL-8 y MCP-1 en plasma entre ambos grupos.
En cuanto al seguimiento se observó únicamente una relación estadísticamente significativa entre los niveles de IL-8 y el grosor macular central a los 3 meses de seguimiento.
Estos resultados demuestran que existe una síntesis local de IL-8 y MCP-1 en el edema macular secundario a enfermedad oclusiva venosa. Además los niveles de IL-8 podrían ser un marcador de la respuesta al tratamiento en estos pacientes.
