Las hemorragias intraparenquimatosas tienen una gran relevancia clínica debido a la gran carga de morbi-mortalidad que producen, desproporcionalmente mayor a la prevalencia del total de los ictus; sin embargo, hasta la fecha no existe un tratamiento específico que modifique el curso de esta enfermedad.
Dado que la proteína quinasa ROCK2 está involucrada en multitud de procesos celulares, y que su activación parece deletérea tras una lesión cerebral, así como beneficiosa su activación, estudiamos el pronóstico de los pacientes con hemorragia intraparenquimatosa, en relación a diferentes polimorfismos respecto a la expresión de la proteína y a la actividad de la misma.
Nuestros resultados demuestran que el pronóstico funcional de los pacientes que han sufrido una hemorragia intraparenquimatosa está condicionado por los polimorfismos rs978906 y Thr431Asn del gen Rock2.
© 2001-2024 Fundación Dialnet · Todos los derechos reservados