Las carreras por montaña han sufrido un boom en el número de pruebas y de participantes desde principios del s. XXI, lo que ha venido acompañado de un aumento en las investigaciones relacionadas con esta modalidad deportiva en los últimos años. Existen diferentes entidades que pugnan por la gobernanza del deporte lo que lleva a una proliferación de campeonatos, copas y circuitos llegando a crear cierta confusión.
La primera parte de este trabajo recoge, a modo de antecedentes, una revisión narrativa de las revistas científicas indexadas en la Web of Science relacionadas con las carreras por montaña entre los años 2016 y 2020. Se han identificado los factores de rendimiento y las temáticas investigadas relacionadas con las carreras por montaña. Hoy en día, nos encontramos con una modalidad deportiva relativamente nueva en la que es necesario desarrollar un mayor número y variedad de investigaciones que nos aporten conocimiento sobre ella. Para intentar aportar conocimiento científico en el ámbito de las carreras por montaña la presente Tesis Doctoral plantea los siguientes objetivos: 1) analizar las demandas del ejercicio durante las carreras por montaña, 2) valorar los niveles de resiliencia en un grupo de corredores por montaña, y 3) estudiar la accidentabilidad en las carreras por montaña más habituales.
El análisis de las demandas del ejercicio durante las carreras por montaña se llevó a cabo con un total de 7 corredores que compitieron en diferentes tipos de carreras en las que se registró la frecuencia cardiaca (FC) y la carga fisiológica (TL). La intensidad del ejercicio entre el umbral respiratorio (VT) y el umbral de compensación respiratoria (RCT) se incrementó al aumentar la distancia de la carrera. Del mismo modo, el porcentaje de tiempo de carrera pasado por encima del RCT disminuyó cuando la duración de la carrera aumentó. Sin embargo, el tiempo pasado por encima del RCT fue similar entre las carreras (~50 min). La relación entre TL y la ganancia de altitud acumulada fue similar en todas las carreras (~0.16 AU·m-1). Los resultados de este estudio demuestran las altas intensidades de ejercicio y las cargas fisiológicas sostenidas por los corredores durante diferentes carreras por montaña.
También se ha llevado a cabo la valoración de los niveles de resiliencia en un grupo de corredores por montaña primeramente analizando la estructura factorial de la escala de resiliencia de Wagnild y Young (1993) y posteriormente describiendo los niveles de resiliencia en una muestra española de corredores por montaña. Para ello, se usó una muestra formada por 400 deportistas. Se llevó a cabo una validación cruzada creándose dos submuestras de 200 participantes cada una. Según los datos aportados por la primera submuestra tras en el análisis factorial exploratorio (AFE), se estimaron cuatro modelos mediante análisis factorial confirmatorio (AFC), además se calculó el índice de fiabilidad mediante el alfa de Cronbach (α = 0.90) y se comprobó si existían diferencias significativas entre hombres y mujeres. Los resultados señalaron que un 39 % de los corredores por montaña presentaban una elevada resiliencia, siendo el modelo de tres factores específicos aquel que presentó mejor ajuste.
Por último, se ha estudiado la accidentabilidad en las carreras por montaña para conocer la gravedad, el tipo y la ubicación corporal de las lesiones musculoesqueléticas (MSK) durante las carreras por montaña de 20 a 42 km. Además, se examinaron las tasas de lesiones en este tipo de carreras. Se recopilaron datos sobre lesiones durante 36 carreras por montaña durante 5 temporadas consecutivas de 2015 a 2019. Los participantes informaron todas las lesiones MSK en un formulario estandarizado de informe de lesiones. Los resultados se presentaron como el número de lesiones por exposición de 1000 h y por 1000 participantes. Veintiocho lesiones fueron reportadas. La mayoría de las lesiones ocurrieron en el tobillo (32 %), seguido de la rodilla (14 %) y el pie / dedo del pie (11 %). El número de lesiones representó una tasa general de lesiones de 1.6 lesiones por cada 1000 h corriendo y 5.9 lesiones por cada 1000 corredores. La tasa de letalidad fue de 0. La incidencia de lesiones MSK durante las carreras por montaña de 20 – 42 km es baja. Además, la mayoría de las lesiones que sufren los corredores son de naturaleza menor y se localizan en las extremidades inferiores, principalmente en los tobillos.
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