Las fracturas de cadera en el anciano se deben a caídas en pacientes que sufren osteopenia y, por tanto, fragilidad ósea. La osteoporosis, es una enfermedad silente cuya primera manifestación clínica suele ser una fractura. En la práctica clínica habitual, el método diagnóstico para la fragilidad ósea es la absorciometría de rayos X de doble energía (DXA). La DXA aporta información sobre la cantidad de hueso, pero no sobre su calidad. La mayoría de las fracturas en estos individuos no cumplen con criterios densitométricos de osteoporosis. Por lo tanto, es lógico pensar que existen otras alteraciones estructurales en el hueso que pueden contribuir a su debilitamiento, y por tanto al riesgo de sufrir una fractura.
El objetivo de este trabajo consiste en estudiar las diferencias en cuanto a la microestructura y nanoestructura del hueso trabecular en pacientes con fractura de cadera con un grupo control cuyo diagnóstico era artrosis de cadera y que no sufrieron fractura de cadera.
Para ello, se reclutaron 31 pacientes con fractura de cadera y 42 con artrosis de cadera, interviniéndose quirúrgicamente mediante artroplastia de cadera. De las cabezas femorales obtenidas se extrajo una muestra de hueso trabecular, que se sometió a pruebas de absorciometría de rayos X de doble energía (DXA), micro-tomografía computadorizada (microTC), cristalografía por análisis espectroscópico de difracción de rayos X (DRX) y espectroscopia de resonancia magnética en estado sólido con giro de ángulo mágico (MAS-RNM- ES).
Los resultados obtenidos mostraron las siguientes diferencias entre los grupos: 1) Los pacientes con fractura tuvieron una densidad mineral ósea (DMO) menor que los pacientes con coxartrosis. 2) Los pacientes con fractura de cadera presentaron menor porcentaje óseo, con menos trabéculas y mayor separación entre ellas. 3) No se observaron diferencias entre ambos grupos en el tamaño de los cristales ni en la concentración de 1H o 31P. 4) La DMO se correlacionó con el resto de parámetros estructurales de distinta manera en ambos grupos: En el grupo de coxartrosis, la DMO se correlacionó positivamente con el contenido mineral del hueso (CMO), el volumen óseo y el número de trabéculas, y de forma negativa con la separación trabecular y la concentración de 1H. En el grupo de fracturados, tan sólo se correlacionó de forma positiva con la CMO. 5) La edad se correlacionó en el grupo de fracturas de forma inversa con la concentración de 1H, sin observarse correlación con el resto de parámetros estructurales. En el grupo de artrosis, no se halló ningún tipo de correlación estadísticamente significativa entre la edad y los parámetros estudiados.
En conclusión, los resultados mostraron que existen diferencias microestructurales entre el hueso trabecular de los pacientes con fractura de cadera respecto a los pacientes con artrosis de cadera. Los pacientes con fractura de cadera tuvieron una menor densidad ósea, un menor volumen óseo, un menor número de trabéculas y una mayor separación trabecular. No se hallaron diferencias entre ambos grupos en cuanto al tamaño de los cristales ni a la concentración relativa de contenido mineral ni orgánico. La DMO reflejó un comportamiento dispar entre los grupos de estudio. Mientras que en el grupo de artrosis de cadera se relacionó con la microestructura ósea y la concentración relativa de proteínas en el hueso, en el de fracturas de cadera no tuvo relación con dichos parámetros. Por tanto, probablemente, la DMO podría ser más útil en pacientes que no han sufrido fractura, ya que aporta información acerca de la microestructura ósea y la composición relativa de materia orgánica del hueso. Por último, la edad fue una variable independiente significativa, ya que en los pacientes con fractura de cadera el contenido proteico disminuía con la edad, pero no en el grupo de coxartrosis. Esta disminución del contenido proteico del hueso, podría explicar en parte el aumento del riesgo de fractura asociado a la edad, mejor que otros parámetros como la DMO o la alteración de la microestructura en los pacientes de mayor edad y que han sufrido una fractura de cadera.
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