Además de los virus entéricos clásicos como pueden ser el virus de la hepatitis A y novovirus, existen otros muchos tipos de patógenos víricos que pueden llegar a medios acuáticos pese a que no es imprescindible para completar su ciclo infeccioso. Algunos de estos virus de alto interés tanto científico como sanitario poseen una envuelta en su estructura, lo cual los puede hacer difíciles de recuperar por los métodos de recuperación de virus en aguas que se utilizan habitualmente, más enfocados en los virus de transmisión fecal-oral cuya estructura en el medio ambiente carece de envuelta.
Teniendo como objetivo virus emergentes con envuelta tales como el virus del Nilo Occidental, coronavirus y virus de la influenza, se inició un proceso de optimización de un protocolo de concentración y recuperación de virus mediante filtración por lana de vidrio, un sistema robusto y barato, para que pueda ser utilizado en el seguimiento de virus envueltos sin perder la eficiencia demostrada a la hora de recuperar los virus sin envuelta. Dicho sistema de concentración ya fue utilizado en el grupo para recuperar los principales virus entéricos clásicos, pero no se había probado su eficacia a la hora de concentrar virus envueltos. Utilizando el coronavirus TGEV como modelo de virus envuelto y el virus de la hepatitis A como modelo de virus desnudo, se realizaron y evaluaron pequeños cambios en el protocolo que no cambian drásticamente ni el coste ni el esfuerzo, pero que incrementaron la eficiencia de recuperación de virus envueltos sin perjudicar la recuperación de virus de cápside desnuda.
Una vez optimizado el método de concentración se ha utilizado en diversos tipos de muestras de agua – ya sea embotelladas, aguas fluviales, de pozo, residuales y salobres – para determinar la presencia de los principales virus entéricos clásicos, así como patógenos emergentes tanto envueltos como los ya mencionados coronavirus, virus del Nilo Occidental e influenza y también virus emergentes desnudos como los Astrovirus no clásicos. Junto con la detección de virus en aguas se ha hecho un seguimiento epidemiológico de Enterovirus en aguas tras el brote de abril de 2016, en el que se ha utilizado secuenciación masiva para poder determinar la población de Enterovirus en las aguas residuales del área de Barcelona.
Los resultados confirman que el método optimizado de filtración por lana de vidrio es un sistema fiable para la detección de virus en aguas con el que se han hecho varios hallazgos de interés, en especial en aguas fluviales del área de Riad – Arabia Saudí –, del Delta del Llobregat y de las aguas residuales barcelonesas.
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