Durante las últimas dos décadas, los mercados de trabajo europeos y los Estados de bienestar han sufrido muchas transformaciones que han cuestionado el paradigma tradicional basado en contractos permanentes, estabilidad general y garantías de protección social. En el debate europeo sobre los retos de los mercados de trabajo el concepto de flexiguridad promovido por las instituciones europeas se ha convertido en predominante. Esto se puede considerar como la respuesta europea a la vulnerabilidad social y tiene como objetivo hacer frente a su estallido, mientras fomenta la flexibilidad del mercado laboral y persigue la competitividad económica. El concepto de vulnerabilidad social, si tratado a la luz del enfoque de las capacidades de Amartya Sen, significa la imposibilidad para las personas de ejercer su libertad de elección y perseguir lo que valoran en su vida.
Esta tesis ha evaluado las políticas de flexiguridad y los mecanismos de lucha contra la vulnerabilidad social asociada a una situación de precariedad o desempleo a la luz del enfoque de las capacidades en España e Italia. Analiza las tendencias y transformaciones de la legislación laboral, los sistemas de protección social y los mercados de trabajo en el período entre 1997 y 2008 con el fin de definir los perfiles nacionales de vulnerabilidad. El núcleo de la tesis es el análisis del marco cognitivo y normativo de los principales actores involucrados en el diseño e implementación de las políticas. Por otra parte, se han examinado las representaciones de las políticas de flexiguridad de los actores que actuan como informantes clave en el ámbito del empleo. Con el fin de evaluar las políticas de empleo, se ha adoptado una metodología diversificada. Se han empleado fuentes secundarias para contextualizar las políticas, mientras que se ha utilizado un método cualitativo para evaluar los marcos y los discursos.
Mirando a los perfiles nacionales de vulnerabilidad social, España presenta una vulnerabilidad social dinámica que deriva de una situación precaria caracterizada por una alta tasa de temporalidad y de desempleo. Italia muestra la configuración de una vulnerabilidad social estática con tasas de desempleo a largo plazo extremadamente altas, así como los porcentajes de personas desalentadas que han renunciado a la búsqueda de empleo. En ambos casos, el marco legal ha fomentado la flexibilización del mercado laboral, pero no ha favorecido la estabilidad laboral, el aprendizaje permanente y el mantenimiento de los ingresos, que tienen un papel clave en la creación de oportunidades valiosas para los individuos y en la aplicación de una estrategia de flexiseguridad. Además, los modelos sociales español e italiano parecen particularmente cercanos a la idea de un modelo social de bajo coste, ya que se caracterizan por escasos gastos tanto en las políticas pasivas como en las activas.
El marco cognitivo italiano parece tener principalmente una orientación cultural e individual, mientras que el español parece más orientado políticamente y socialmente. Por otra parte, los actores españoles parecen estar más orientados a cuestionar y problematizar cuestiones específicas que los colegas italianos, y los representantes sindicales más que los otros actores. Los representantes españoles e italianos pertenecientes a organismos públicos muestran una gran aceptación del marco de la activación en términos de responsabilidad individual para la integración en el mercado laboral. La conclusión no puede ser diferente a la que indica que las expectativas hasta el momento, las esperanzas de libertad de elección y el desarrollo de capacidades que permiten a las personas perseguir y alcanzar lo que valoran se han hecho añicos, especialmente para los jóvenes. Por lo tanto, el enfoque de las capacidades no parece ser el marco cognitivo y normativo operativo en los casos de España e Italia.
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