Para controlar la podredumbre radical causada por Phytophthora cinnamomi que afecta al arbolado en las dehesas del sur de la Península Ibérica, se debe recurrir a un sistema de control en el que se integren medidas culturales y/o biológicas aptas a este ecosistema. La aplicación de enmiendas calizas (CaCO3, CaO o CaSO4) y KOH, en general, inhibe la producción y germinación de esporangios, así como la producción de clamidosporas del patógeno y como consecuencia, disminuye la tasa de infección y la sintomatología de la enfermedad radical causada por P. cinnamomi en encinas. Además, las encinas con una buena nutrición cálcica presentan una mayor tolerancia a la infección por el patógeno. Por otra parte, los híbridos de encina con Q. faginea, resultan menos susceptibles a P. cinnamomi que los morfotipos de encina testados, por lo que el quejigo puede ser considerado como una fuente de resistencia al patógeno en futuras estrategias de mejora. Finalmente, a partir de muestreos realizados en campo y con la posterior cumplimentación de los postulados de Koch, se concluye que Lupinus luteus (altramuz amarillo) es susceptible a P. cinnamomi, actuando como reservorio del patógeno, manteniendo o incluso aumentando la densidad de clamidosporas viables para causar infección al arbolado en campo. Además, el altramuz estimula significativamente la producción de zoosporas infectivas del patógeno frente a otras herbáceas cultivadas en dehesa, como Vicia sativa (veza), que ha resultado huésped asintomático de P. cinnamomi o Triticum aestivum (trigo) y Avena sativa (avena), que no son huéspedes del patógeno.
© 2001-2024 Fundación Dialnet · Todos los derechos reservados