Las colinas de la Sabika y del Mauror, sobre las que se asientan la Alhambra y Torres Bermejas, constituyen los espolones avanzados hacia poniente de un largo promontorio que desde el siglo XVI viene siendo conocido como Cerro del Sol. Se trata de un depósito aluvial que separa los valles del Darro, al norte, y del Genil, al sur, actuando como divisoria de aguas entre estos dos cursos fluviales. Esta elevación constituyó la parte principal del área territorial de la Alhambra, pues a través de ella llegó el agua que permitió su desarrollo y hacia ella tuvo vocación de expandirse.
En esta Tesis Doctoral se han analizado los usos de este espacio singular del entorno de Granada en la Antigüedad romana y en época andalusí, tomado como hilo conductor los trazados, aprovechamientos y funciones desempeñadas por el agua. La investigación desarrollada ha estado articulada en torno a cuatro ejes que en el Cerro del Sol están íntimamente relacionados: la explotación del territorio, la red hidráulica desarrollada, las construcciones erigidas en el mismo y las infraestructuras viarias que lo han vertebrado a lo largo de la historia.
© 2001-2024 Fundación Dialnet · Todos los derechos reservados