La máxima competición del baloncesto español ha cambiado esta temporada de nombre en virtud de un acuerdo entre la ACB y Endesa, que se convierte así en la primera compañía que da nombre a la liga en sus tres décadas de historia. Cinco millones de euros por temporada durante los próximos cuatro años (hasta la finalización de la temporada 2014-2015, con opción a dos años más) es lo que le costará a Endesa incluir su nombre en el logo de la competición y que su azul corporativo se convierta en el color oficial de la ACB.
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