La caída de la demanda interna sufrida en España en los últimos años ha motivado a muchas pequeñas y medianas empresas (PME) a buscar oportunidades comerciales en el mercado internacional. Los procesos de internacionalización no son fáciles para ellas, que se enfrentan a desafíos significativamente distintos a los de las grandes compañías. El artículo analiza, primero, el grado y el alcance de las actividades internacionales de las PME españolas, y después la relación que existe entre el grado de internacionalización de estas empresas y otros dos factores: el tipo de propietario que las gobierna y las modalidades que eligen para ingresar en nuevos mercados
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